El Gobierno sanchista, una vez más, ha vuelto a hacer el ridículo internacional.
El Ejecutivo de Pedro Sánchez dejó pasar la ocasión de posicionarse en contra del ataque sufrido por Israel a manos de Irán y cuando quiso hacerlo el resultado fue casi peor.
Carlos Herrera lo describió a la perfección este 15 de abril de 2024 en su editorial en 'Herrera en COPE'.
El comunicador almeriense destacó que quien sí había tenido una altura de miras y una reacción impecable fue el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo:
¿Y España qué ha hecho? Pues mire, España ha salvado su imagen, imagen internacional, gracias a la oposición y a la reacción impecable de Feijóo. Pero el presidente del Gobierno de España ha hecho el ridículo. Esta especie de miss mundo de barrio que tenemos en La Moncloa. Les dijimos el viernes que la gira de Sánchez a favor del reconocimiento del Estado palestino no podía ser más absurda y más inoportuna. Y le ha dejado el ataque iraní, le ha dejado a Sánchez colgado de su brocha. Ya todo el mundo occidental está en su sitio. Y este está en otro. Y se vio la noche de autos.
Para el periodista estrella de la emisora episcopal, Sánchez ha vuelto a perpetrar otro ridículo que, lógicamente, salpica a España:
Mientras países de nuestro entorno con más fuste que España condenaban sin reserva el ataque iraní contra Israel, Sánchez hablaba de seguir con preocupación unos acontecimientos. Un acontecimiento de 350 bombas lanzadas contra Israel. Y el ridículo fue tan notable que horas después Sánchez se vio obligado a corregirse, condenar el ataque iraní, pero sin decir quién era la víctima. Porque decir que Israel es víctima te obliga a solidarizarte con ellos. A este le da una parálisis si tiene que solidarizarse con los judíos de Israel.