La izquierda es la ideología del odio, de la ruina, de la miseria, del caos, del crimen... nada que no sepáis. Este fin de semana nos lo han vuelto a demostrar. Lamento recurrir siempre a los mismos ejemplos, pero voy a irme unos instantes a una de las guerras civiles que ha vivido España en su historia, la última. Y dentro de ella, la guerra intestina que protagonizaron las izquierdas en Barcelona, en febrero de 1937, donde dirigentes comunistas y anarquistas se desollaron vivos, literalmente.
Estos tipos comienzan odiando al de arriba, al fascista, al capitalista, y terminan odiándose a sí mismos y despellejándose entre ellos.
Este fin de semana, del 10 y 11 de junio hemos tenido dos buenos ejemplos: el primero en el podcast, 'canal rojo' o como se llame del ex-coletas, en el que se ha comenzado a 'disparar' a lo bestia, 'con el arma larga', contra Yolanda Díaz, por haber dictado 'orden de alejamiento político' contra Montero, Echenique o Belarra. 'Producto del franquismo sociológico', la ha llamado Pablo Iglesias por su histórica militancia -y la de su padre- en el sindicato CCOO.
El otro ejemplo de odio intestino entre la izquierda lo hemos tenido en el Comité Federal del PSOE, en el que las listas han quedado aprobadas pero a bofetadas entre los barones y el secretario general, Pedro Sánchez, que ha salvado este primer 'match point' interno pero que ya gestiona abiertamente su previsible fracaso electoral y busca arreglarlo todo para aparentar una salida honrosa para 'su persona'.