Con esta carta a Mariano Rajoy Juana Rivas agota su último cartucho. Reitera que su exmarido es un maltratador, que tanto sus hijos como ella han vivido historias de terror en completa soledad y que aún así es él quien pasea libre por la ciudad mientras ella tiene que esconderse aterrorizada con sus hijos.
Ayer mismo tenía que haberse presentado en los juzgados de Granada, pero no lo hizó. Si asistió su exmarido Francesco Arcuri, que niega rotundamente las acusaciones de Juana
Ésta fue su última aparición pública el día antes en el que debía entregar a sus hijos al padre.
Cumplió su amenaza y desde el 26 de julio ha estado desaparecida con los pequeños y con el apoyo de todo su pueblo, Maracena. Desde su refugio, pidió amparo al Tribunal Constitucional, que fue denegado por estar fuera de plazo. No era la primera la primera vez que la justicia le quitaba la razón. El 8 de agosto, incluso, el juez dictó una orden de detención contra ella por no presentarse, nuevamente, en los juzgados. Aún así, Juana Rivas asegura que sigue teniendo esperanza.