NI EL EMPERADOR CONSTANTINOPLENSE EN DEFENSA DE SU IMPERIO, NI LA HORDA TURQUESCA EN SU AFÁN INVASOR, PODRÍAN DESBARAJAR UN APARTÓN DE MANOS HECHO CON SAÑA EN DESPOJO DE LA REAL MAJESTAD. Dejamos ilustrado un nuevo gesto impertinente de la funcionaria royal Letizia La Fiztizia, hecho con descarnado yerro contra el protocolo, ejecutando un apartón de mano al Presidente de la república del Perú, Martín Vizcarra. El afán sobreferino de la funcionaria royal por sustentarse en la vanidosa guerra de sí misma, la conduce a actos groseros llenos de cismaticidad infidelísima en el yerro de tamaña perfidia por holguearse de la regla, descomulgada como la tenemos desde ha mucho, por sus muchas jornadas para tan poca reputación, el mucho pesar para tan pocas leguas y más aderezo que cocina. Válgase, pues, correr campo y pasar por vega, antes bien que saber de papeles y librotes sin discurrir ejercicios de cabeza.