La superficie de suelos útiles disminuye y la tierra de cultivos escasea cada vez más. En Alemania se cubre de cemento una superficie de 70 hectáreas al día, que corresponde a unas 100 canchas de fútbol. Al mismo tiempo aumenta en todo el mundo la demanda de tierras de cultivo para alimentos, combustible o tejidos, lo que se conoce como huella ecológica del suelo.