El trastorno de identidad disociativo es un diagnóstico controvertido descrito en el DSM IV como la existencia de una o más identidades o personalidades en un individuo, cada una con su propio patrón de percibir y actuar con el ambiente. Al menos dos de estas personalidades deben tomar control del comportamiento del individuo de forma rutinaria, y asociadas también con un grado de pérdida de memoria más allá de la falta de memoria normal. A esta perdida de memoria se le conoce con frecuencia como tiempo perdido o amnésico. Para ser diagnosticado, los síntomas deben ocurrir independientemente del abuso de substancias o una condición médica general (inducción). El trastorno de identidad disociativo parece estar causado por la interacción de varios factores:
El estrés insoportable, como el haber sufrido abusos físicos o psicológicos durante la niñez.
Una habilidad para separar los propios recuerdos, percepciones o identidades del conocimiento consciente (capacidad disociativa).