O todo es un teatrillo perfectamente pergeñado o a Pedro Sánchez le han tomado el pelo de manera colosal.

El PSOE sigue notando los nocivos efectos secundarios que tiene la famosa foto de su número tres, Santos Cerdán, reunido en el despacho del prófugo Carles Puigdemont en el Parlamento Europeo, en Bruselas.

Y es que lo que hace justo una semana, el 31 de octubre de 2023, se vendió como el símbolo definitivo para fijar la fecha de la investidura del candidato socialista, se ha tornado ahora en mayores complicaciones para el inquilino de La Moncloa.

Vicente Vallés, en su informativo de Antena 3 del 6 de noviembre de 2023, le lanzó un estacazo a Pedro Sánchez por el hecho de haber 'quemado' a ese baluarte de la formación de Ferraz en la llamada imagen de la vergüenza.

Y es que, resaltó el comunicador de la primera cadena de Atresmedia, si el objetivo era 'sacrificar' a una pieza tan relevante por acelerar los plazos de la investidura, lo cierto es que la estratagema se ha tornado completamente inútil.

El periodista recordó lo que sucedió desde que se produjo esa estampa de Santos Cerdán compadreando sin rubor alguno con los independentistas catalanes en una estancia en la que, además, había un cuadro en el que se hacía un alegato en favor del tristemente famoso referéndum ilegal de independencia, el del 1 de octubre de 2017:

La imagen es de hace una semana, del pasado lunes, cuando Pedro Sánchez envió a Bruselas a su número tres en el PSOE, Santos Cerdán, para hacerse la foto con Carles Puigdemont. La lógica de aceptar una imagen tan embarazosa y perturbadora como esa, con un prófugo de la Justicia, solo podía ser porque se tratase de la última exigencia de Puigdemont. Es decir, que para firmar el acuerdo, Puigdemont exigiera ser reconocido como un interlocutor político legítimo.

Y se daba por seguro que Sánchez solo hubiera sometido a su número tres a un trago como la fotografía con Puigdemont porque el acuerdo estaba hecho o prácticamente hecho. Pero el martes no se firmó ningún acuerdo, ni el miércoles, ni el jueves, ni el viernes, ni el sábado ni el domingo ni tampoco este lunes. Al menos hasta este momento.

La atención de todos sigue puesta en Bruselas, donde está Carles Puigdemont. La dirección de su partido ha estado reunida con él otra vez allí y otra vez sus miembros se han ido sin que el acuerdo se haya alcanzado.