Una nueva investigación ha señalado la importancia de bajar la tapa, además del asiento, al tirar de la cadena.
El estudio ha descubierto que dejar la tapa del inodoro abierta después de tirar de la cadena permite que las gotas contaminadas se dispersen hasta 1,5 metros.
Si la tapa está levantada, las partículas pueden permanecer en el aire hasta 30 minutos después de tirar de la cadena.
Los científicos afirman que dejar la tapa levantada podría provocar la transmisión de bacterias y virus.
El número de gotitas generadas por una descarga de inodoro es similar al de una persona hablando en voz alta durante seis minutos y medio.
El estudio ha sido publicado por investigadores de la Universidad de Australia Meridional y financiado por Dyson Technology Ltd.