Según denuncia la ONG Survival, su pueblo fue masacrado en sucesivos ataques desde los años 70's a medidas de los 90's, por pistoleros contratados por terratenientes y colonos que querían explotar la zona. Vivía en una de las regiones más peligrosas del Amazonas brasileño, Rondonia, en donde hay actividades de minería y deforestación ilegal. El conocido también como 'Indio Tanaru' sobrevivó más de tres décadas solo en medio de la selva, construía sus propias casas a modo de choza, tenía sus utensilios y cultivaba maíz, plátano o papaya.