La marcha indígena ya ha entrado en su destino: la Paz, la capital de Bolivia. Llevan 65 días caminando. Han recorrido a pie 600 kilómetros, la misma distancia que hay entre Madrid y Barcelona. Es la segunda vez que hacen este recorrido en un año, y las dos veces por el mismo motivo: la autopista que el gobierno quiere construir en el Amazonas. La carretera atravesaría el parque Natural de Isiboro. El año pasado, los activistas consiguieron que el presidente, Evo Morales, diera marcha atrás en los permisos de construcción. Sin embargo, hace poco, el gobierno ha anunciado que someterá la decisión a referendum en las 63 comunidades indígenas que viven en el Parque Nacional. Los indígenas piden que el proyecto se retire definitivamente. La tensión sobre este asunto es considerable, y la protesta de este viernes en la Paz ha acabado con enfrentamientos. El viceministro de interior ha asegurado que rechaza la violencia"Hay 7 u 8 policías heridos graves. Repudiamos estos actos violentos", ha dicho Jorge Pérez. La construcción de la autopista se está conviertiendo en un problema importante para Morales, el primer presidente indígena de Bolivia. Su postura está haciendo que muchos de los que le apoyaron dude de su compromiso con las comunidades indígenas y con el medio ambiente.