Cargados con comida para los 6 perros que lleva cada trineo, con tiendas de campaña y con diversos utensilios, 28 personas han completado la última edición del Fjallraven Polar. Una prueba que parte de Noruega con destino a Suecia y que consiste en atravesar 300 kilómetros del desierto ártico con lo que esto conlleva: tormentas de nieve y temperaturas de menos 30 grados, eso sí, disfrutando de las auroras boreales y de los imponentes paisajes. Lo que hace de esta competición algo único, es que puede participar cualquiera que lo desee, aunque no tenga experiencia en el trineo de perros.