Francisco Granados ha negado hoy que recibiera un chivatazo por parte de un agente de la UCO sobre si le estaban investigando. Durante su declaración en el juicio que se sigue en la Audiencia Nacional, Granados ha relatado que una conversación "inocua" con el guardia civil José Manuel Rodríguez Talamino en las fiestas de Valdemoro, sobre compañeros suyos que estaban trabajando por Valdemoro y Pinto, fue interpretada por él como una "advertencia". Este hecho, hizo que llamase a José Luis Caro, guardia civil en excedencia y amigo de Talamino, para pedirle que lo aclarase. Granados ha negado tajantemente que Talamino le advirtiera de la colocación de cámaras. Asimismo, en el juicio se ha escuchado la conversación telefónica con David Marjaliza, realizada a la mañana siguiente, contándose su inquietud tras la conversación con Talamino que él interpretó como que "estaban haciendo cosas en tu puerta" de la oficina.
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