La llama de la ira continúa encendida en Turquía por sexto día en el que las calles de Ankara siguen siendo escenario de barricadas y fuertes cargas policiales. En la plaza Kizilay los antidisturbios volvieron a enfrentarse a los manifestantes con cañones de agua y gases lacromógenos envolviendo las calles con un denso humo.