El mejor lugar para que los más pequeños guarden sus ahorros son las huchas.Lo sabe mejor que nadie un niño chino que se tragó una moneda y ha sufrido mucho para conseguir expulsarla. Su madre y los médicos descubrieron el objeto en una radiografía. Unos amigos se la pusieron en la boca cuando estaba dormido, y sin querer se la tragó. Pero no dijo nada en cinco días, cuando comenzó a sentir un gran dolor.Se alojó en su estómago, donde podía originar una perforación. Pero los médicos decidieron no operarle, sino extraerla por la boca. Liberado ahora tiene claro que hay cosas que es mejor no probar.