El presidente de Cuba, Raúl Castro, ha hablado de los presos políticos en huelga de hambre y del apoyo a los disidentes desde Estados Unidos y algunos países de la Unión Europea.Castro se ha referido a una campaña de descrédito contra Cuba por la muerte en febrero del disidente preso Orlando Zapata tras 85 días de huelga de hambre. El mandatario cubano ha reiterado que los presos en huelga de hambre son "delincuentes comunes" y que si se mueren es culpa suya y de quienes les apoyan y "financian". Castro, ha afirmado que su país no cederá al "chantaje" de Estados Unidos y algunos países de la Unión Europea, pues en su opinión estos estados apoyan la huelga de hambre que desde hace mes y medio mantiene el disidente Guillermo Fariñas, encarcelado en una prisión de la isla, en protesta por la situación en que viven numerosos presos políticos cubanos que se  encuentran enfermos. "Se está haciendo lo posible por salvarle la vida (de Fariñas). Pero si no modifica su actitud autodestructiva, será responsable, junto a sus patrocinadores, del desenlace que tampoco deseamos", ha añadido Castro durante un congreso de la Unión de Jóvenes  Comunistas.