En Birmania, la Junta Militar sigue ocultando a la población la magnitud del desastre provocado por el ciclón Nargis. Según su último recuento, hay 32.000 muertos y 30.000 desaparecidos. Sin embargo, la ONU calcula entre 60 y 100 mil víctimas mortales, más de 200.000 personas desaparecidas y casi dos millones sin hogar. Hasta el momento, la Junta Militar había rechazado la entrada de cooperantes extranjeros al país o de ayuda humanitaria, pero ahora ha relajado parcialmente estas restricciones y permitirán la entrada de un equipo de expertos de la Asociación de naciones de sudeste asiático para que valoren la situación y los daños provocados por el ciclón.