Esta mañana en Neustift, Austria, la selección Española ha entrenado por fin libre de una maldición que ya llevaba años pesando, el pase a semifinales que ha inyectado de moral al equipo. El técnico de España, Luis Aragonés, ha reconocido que se emocionó anoche al recibir los mensajes de felicitación, muy especialmente al escuchar uno de su nieto. El pase a semifinales, donde se medirá ante Rusia, se logró en una tanda de penaltis frente a Italia que hizo vibrar a media España. Fue un final precioso, pero con mucha tensión. Hoy, esa tensión estaba ausente, el ambiente en el entrenamiento de los jugadores era fantástico.