La selección española ha entrenado esta mañana en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas en medio de un ambiente de tensa normalidad. Todos los ojos estaban puestos en Gerard Piqué, después de lo sucedido durante la jornada del referéndum ilegal del domingo y del hostil recibimiento a su llegada a la concentración este lunes. El central blaugrana se ha mostrado relajado y sonriente durante toda la sesión de trabajo, aunque no se ha mezclado mucho con los jugadores del Real Madrid como Sergio Ramos.
-Redacción-