Un vecino de Leiland abandonó a sus perros en un cobertizo bajo llave que se estaba inundando como consecuencia del huracán.
El nivel del agua seguía subiendo cuando Ryan Nichols descubrió a los perros atrapados.
Nichols consiguió abrirles la puerta y los perros salieron del cobertizo por su propia pata.
La alegría de los animales al verse libres fue inmensa.
Los perros nadaron hasta una zona boscosa sin agua y fueron atendidos por los voluntarios del operativo de rescate.