Madrid, 16 nov (EFE).- (Imagen: Ramón Ayala).- El exconsejero madrileño Francisco Granados, que está siendo juzgado por el soplo que le alertó de que le estaban investigado, ha dicho del que fuera su amigo David Marjaliza hasta que comenzó a colaborar en el caso Púnica, que es "un delincuente confeso que además no acredita nada de lo que dice porque dice que no lo puede acreditar 'porque lo he roto'".
"Ante eso ¿cómo se defiende uno?, ¿cómo uno demuestra que no ha ocurrido?", se ha lamentado Granados en declaraciones a los periodistas antes de que se reanudara tras un receso este juicio, que comenzó el pasado martes y hoy quedará visto para sentencia.
Sobre la declaración que ha prestado Marjaliza como testigo en el juicio, Granados, que se enfrenta a una petición del fiscal de tres años de cárcel, ha observado que su relato "se apoya en su grupo criminal. El señor que le lleva los cuadros a Suiza -Eduardo de la Peña-, en la señora que tiene un marido guardia civil -la secretaría de Marjaliza- que lleva el dinero a Suiza..."
"Pero bueno, me dice mi abogado que me acostumbre a tener el oído preparado para estas calumnias en cada una de las piezas en que lamentablemente me ha metido este señor", ha asumido.
Ha rogado también a los periodistas que no se sigan refiriéndose a Marjaliza como su socio. "Este señor no ha sido socio mío nunca, su testateferro y persona de confianza -Antonio Serreano Soldado (abogado, que se ha identificado en el juicio como asesor jurídico del empresario) acaba de confirmar que yo de este señor no he sido socio".
TOTALES DEL EXCONSEJERO MADRILEÑO FRANCISCO GRANADOS.