Esta semana empieza la reunión de la Reserva Federal por la cuestión de las tasas de interés.

El Gobierno anunció que van a seguir adelante los aumentos de tarifas.

El gas está subiendo entre 30 y 40% desde el 1º de abril.

Hay pendiente un aumento de electricidad pero me parece que la cosa va a quedar para noviembre, después de las elecciones.

En la nota de Joaquín Morales Solá aparece un dato muy relevante. El programa de Precios Transparentes, derivó en un problema muy serio en febrero que es que cayeron las ventas.

50% la caída de ventas de electrodomésticos.

Ha habido una disputa muy fuerte entre la Secretaría de comercio y las tarjetas de crédito.

Puede haber novedades con el tema del financiamiento de las tarjetas.

Yo pregunto, ¿el Gobierno le va a enseñar al señor Garbarino, al señor Frávega, al señór Rodó, al señor Musimundo, les va a enseñar a hacer una vidriera para vender televisores?

De todo lo que se publicó el fin de semana en reportajes..., el monseñor Lozano dijo "no quiero ser alarmista, pero los números de la pobreza muestran que no hay paz social".

Lo más espectacular fue el reportaje al CEO de Avianca, Germán Efromovich. Le preguntaron qué opina de la postergación de las nuevas rutas para Avianca. Dice que la autorización de rutas en un país democrático debe ser abierta.

Dice que autorizar las rutas no es un favor que hace un gobierno, es una obligación.

Eduardo Vázquez en El Cronista dice que subsidiar Aerolíneas Argentinas cuesta 11 millones de pesos por día. Le preguntan por qué mantuvo a Carlos Colunga, que es un hombre de Franco Macri. Dice que cuando compró Avianca en el 2004 no cambió una sola persona, que su trabajo en Avianca en Argentina fue excelente.

Miguel Ángel Broda dice que falta un programa, un ministro de Economía que coordine. Dice que Macri está en un garete, el Presidente no sabe qué hacer, si aumentar el déficit fiscal para ganar las elecciones o si profundizar la política monetaria de metas de inflación.

Héctor Daer dice que el problema es que este gobierno no cree en el estado, que lo demuestra como poner en la Secretaría de Comercio al dueño de un supermercado.