Cinco personas, incluidos dos niños y un bebé de pocos meses, perecieron anoche en aguas del Egeo al naufragar la embarcación con la que se dirigían a Europa. Los servicios de emergencia turcos lograron rescatar con vida a nueve personas. Otras dos, han desaparecido.
La nave zarpó de la costa occidental de Turquía rumbo a la isla griega de Lesbos con un grupo de inmigrantes procedentes de Irán y Afganistán. Todas las víctimas son de esta última nacionalidad.
El flujo del éxodo continúa a pesar del cierre de fronteras a lo largo de la llamada ruta de los Balcanes y de preacuerdo para devolver a Turquía a todos los inmigrantes y refugiados que lleguen a Grecia.