El Leganés aumentó su ventaja al frente de la Liga Adelante al vencer con contundencia (0-3) a un Albacete que acumula ocho jornadas sin ganar y que tras la derrota se encuentra ya a cuatro puntos de la permanencia.
El líder, que gracias al empate del Alavés ante el Zaragoza situó su diferencia en tres puntos, mostró sus credenciales nada más empezar, gracias a un pase de Omar Ramos por encima de la defensa que dejó sólo a un Borja Lázaro que, de vaselina, superó la salida del meta Juan Carlos para inaugurar el marcador (m.2). Ese golpe condicionó el encuentro, porque el Leganés se mostró muy cómodo jugando al contragolpe y presionando la salida de balón de un Albacete que abusaba de los balones largos de su portero Juan Carlos.
Hasta llegar a la media hora de juego el choque transcurrió sin apenas llegadas pero, a partir de ahí, despertó el cuadro local y un tiro de Portu, que se estrelló en el palo de Serantes, estimuló a una afición local que ya había pitado a los suyos.
Omar Ramos pone la sentencia
No obstante, se reprodujeron principalmente cuando, poco antes del descanso, llegó el segundo tanto del Leganés, gracias a una magnífica acción de Omar Ramos. Con el público en contra de sus jugadores, Borja Lázaro se encontró un balón suelto en el área pequeña que, incomprensiblemente, mandó alto cuando todo hacía presagiar la llegada del tercer tanto, para cerrar así la primera mitad.
Luis César Sampedro, quien también fue silbado, decidió sacar al delantero Jona por Samu para jugarse el todo por el todo en el segundo acto. Pero el conjunto pepinero siguió metido atrás, esperando su oportunidad hasta que, en el minuto cincuenta y ocho, Rubén Peña sentenció el encuentro tras dos intentos fallidos de despeje de Antoñito y Mario Ortiz que dejaron al centrocampista del cuadro madrileño un balón franco para marcar el 0-3.Comenzaron a escucharse los gritos de ¡Sampedro vete ya! y los seguidores locales ni siquiera pudieron celebrar el tanto del honor en una vaselina de Portu que abortó la zaga del leganés (m.76). Incluso Ruiz de Galarreta, un par de minutos más tarde, se llevó la ovación de la tarde al sacarse un tiro desde lejos con rosca que escupió la cruceta de la portería albaceteña. No hubo más historia en un encuentro que acabó con la afición local despidiendo a los suyos con una sonora pitada mientras el cuadro visitante celebraba su liderato distanciándose más de sus seguidores.