"Cuando el poder no quieres ser compartido", podría ser el título perfecto para este episodio que vive España y que involucra, a Irán y a su televisora HispanTV.

Después de las elecciones generales españolas el pasado 20 de diciembre, sucedió algo histórico: la gran derrota del Bipartidismo en España. Los poderosos ya no son tan poderosos y la nación española ahora tendrá más democracia con más voces que dirijan su futuro.

En este escenario aparece una fuerza con mucha fuerza: el partido Podemos y su líder Pablo Iglesias. Se consolida como la tercera fuerza más poderosa de España.Curiosamente después de esta victoria para ese nuevo partido político, comienza una guerra contra él y su líder, Pablo Iglesias.

Medios de comunicación españoles, publican una serie de acusaciones. Lo acusan de que su partido fue financiado por un gobierno extranjero: Irán (la ley española prohíbe dinero extranjero en los partidos políticos). Lo acusan que usó su programa de televisión Fort Apache, que emite HispanTV, como ruta para disfrazar la inyección de dinero a su partido.

Pero en la realidad de los hechos, nadie presentó evidencia para comprobar estas acusaciones. Porque en los hechos, primero está que Pablo Iglesias vende su programa a una productora y distribuidora española.

Y que Hispantv si bien emite el programa, no tiene ninguna relación con Iglesias ni con su partido. Incluso la productora no solo paga el programa sino que le paga un teléfono a Pablo Iglesias, por ser el productor de su show, tal como lo hacen muchas productoras en el mundo.

En parte de los hechos también está que otros medios españoles publican que la Justicia de España ni la Unidad de la Delincuencia Económica y Fiscal investigan a Pablo Iglesias. Entonces esto significa algo más grave.

¿A quién le interesa desprestigiar a Pablo y su partido morado? ¿Para qué lo quieren desprestigiar? En el campo de los hechos hay dos escenarios que podrían encajar perfecto como motivo de la guerra de desprestigio, ya sea para desviar la atención o para manipular decisiones, estos son a saber: 1.- En este momento, el Partido Popular, enfrenta una crisis de desprestigio cuando se revela un terrible caso de corrupción en el PP Valencia. 2.- Desprestigiar a Podemos podría arruinar una coalición con el PSOE para poder gobernar España.

Entonces las preguntas saltan: ¿Por qué la fiscalía o las autoridades judiciales de España no han llamado a declarar a Pablo ni han iniciado acusación formal contra él y su partido? Si no hay ninguna acusación formal, ¿por qué se viola la Justicia con calumnias, injurias y desprestigio -porque esto es un delito-, contra Podemos y su líder...?

¿Qué los medios españoles no están regidos por la ética periodística y por la propia Justicia de España? Como hipótesis de trabajo: ¿si se demostrara una presunta culpabilidad de Podemos y Pablo Iglesias, a quién le beneficiaría esto?

Graves problemas hay en la política de España, hoy analizaremos que hay detrás, en Detrás de la Razón, esta noche con el análisis desde los estudios de Teherán, a las nueve treinta; Londres, cinco de la tarde, México, doce del día; Colombia, una de la tarde; Madrid, siete de la noche.