El presidente de la región autónoma del Kurdistán iraquí, Masud Barzani, ha finalizado una visita oficial de una semana en Washington, la primera en casi tres años.

El líder kurdo recibió elogios por el trabajo de los peshmerga en la lucha contra el grupo Estado Islámico. A pesar de ello y de que Barzani quiere que los combatientes sean armados por Estados Unidos, Barack Obama se mostró distante sobre las aspiraciones de una autonomía kurda.

“En estos momentos no creo que a Estados Unidos o a Irak les interese tener un Kurdistán independiente. Incluso diría que ni a los propios kurdos. La situación en la región es bastante inestable y como ha sugerido
Barzani”, eso es algo que puede esperar”, afirmó Paul Bremer, exadministrador civil estadounidense en Irak.

El corresponsal de Euronews en Washington, Stefan Grobe, explica que Barzani no volverá a casa con las manos vacías:

“El presidente Barzani fue recibido en Washington como un aliado de gran éxito en la lucha contra el grupo