Túnez intenta recuperar la normalidad tras la irrupción del terror yihadista. El museo de El Bardo de la capital, donde el pasado miércoles una célula del autodenominado Estado Islámico mató a 21 personas, ha reabierto para ofrecer un concierto al que solo han podido asistir prensa e invitados.
A algunos turistas el atentado no les ha hecho cambiar sus planes, como a una mujer que explica que no solo decidió no cancelar su itinerario, sino que acudió al lugar del suceso para tomar fotos y expresar su solidaridad.
Otros muchos visitantes han querido mostrar sus condolencias. Está previsto que la apertura al público, que en teoría iba a ser el martes, se produzca en los próximos días, según fuentes oficiales.
El ministro italiano de Exteriores Paolo Gentoloni ha acudido al recital ofrecido por la orquesta sinfónica de Túnez y ha depositado ramos de flores en honor de las víctimas.
Cientos de personas se habían concentrado en el museo a la espera de que abriera sus puertas y t