¿Quien nunca soñó con transformar el agua en hielo instantáneamente, como un superhéroe?

¡Pues créalo o no, pero es posible! ¡Y sin magia!

Simplemente gracias a un pequeño experimento fácil y divertido.
Para realizarlo, se necesita solamente un congelador y una botella de agua (preferentemente cerrada).
Coloque su botella en el congelador durante aproximadamente 2h - 2h30, sáquela y dele un choque. ¡Increíble! El agua se transforma en hielo ante sus ojos.
De hecho, el agua en el congelador estaba en estado de sobrefusión. Es decir que había alcanzado su temperatura de solidificación pero quedándose líquida.
¡En este estado, una simple perturbación puede producir el cambio del agua en hielo!