La apuesta decidida y sostenida en el tiempo de apoyo al comercio es consecuencia de la importancia que este sector tiene como dinamizador y motor económico de la región, que genera empleo y mantiene puestos de trabajo, además de ser un sector clave para garantizar el acceso de todos los castellano-manchegos a bienes y servicios.
El conjunto de medidas del Plan PiCE busca activar y revitalizar el sector económico comercial, fortaleciéndolo a través de la innovación y la tecnificación durante el periodo temporal 2013-2020, y con un enfoque dinámico que permita al programa adaptarse a las necesidades que puedan ir surgiendo a lo largo de su vigencia.