Hoy, hombres y mujeres tienen una vida emocional similar, la diferencia radica en la forma de manifestarla. Expresar los sentimientos se sigue considerando un signo de debilidad. También hay emociones tradicionalmente masculinas y otras femeninas; por ejemplo, la mujer es más libre para expresar la tristeza y los hombres, el enfado. También se aprecian diferencias de género en la frecuencia y modo en que se expresan las emociones. Los hombres manifiestan estar en calma más a menudo; sin embargo, las mujeres se ponen nerviosas con más facilidad. Esto hace que ellos muestren continuidad emocional y ellas presenten más alteraciones en sus sentimientos. Estos cambios se pueden explicar porque la mujer reflexiona mucho más que el hombre sobre lo que siente en cada momento. Los hombres y las mujeres nos diferenciamos hasta en la manera de expresar los sentimientos, pues mientras que las mujeres ven el pasado con nostalgia, los hombres se sienten muy cómodos en el presente y lo disfrutan más.