Madrid, 5 abr (EFE).-
¿Por qué buscar nuevo repertorio cuando el antiguo se compone de canciones relegadas por el peso de los éxitos pero "igual de válidas y a veces incluso mejores"? Bajo esa premisa, el orfebre Raphael ha querido pulir con nuevos arreglos a "lo Big Band" 14 viejos temas en busca de "las nuevas joyas de la corona".
"Las joyas de la corona nacieron así y así tienen que morir. (...) Son como una sinfonía de Beethoven, tienen que estar ahí intocables", explicó hoy a Efe el artista sobre clásicos como "Yo soy aquel" y los motivos que le llevaron a escoger otras piezas menos conocidas para su nuevo disco, "Mi gran noche", un proyecto personal que nace al margen de su discográfica.
Convencido de que "no se escribe ahora como se escribía entonces" y de que en su producción no hay "rellenos", decidió "revisitar" temas de finales de los años sesenta como "Si ha de ser así" o "Poco a poco", reinterpretarlos y añadirles arreglos orquestales, sin los recortes que