El «Día de la Nakba» transcurrió en relativa calma, con marchas y manifestaciones por toda Cisjordania y Gaza pero con muchos menos focos de violencia que en años anteriores, según comunicó la Policía israelí.
«En comparación con los años anteriores en general, y el pasado en particular, hubieron muchos menos focos de violencia», señaló Mickey Rosenfeld, portavoz de la Policía israelí, que cifró en cuatro las personas detenidas.
La agencia palestina Wafa informó, no obstante, que decenas de personas se vieron afectadas por inhalación de gases lacrimógenos o el impacto de pelotas de goma disparadas por las fuerzas de seguridad israelíes.
De acuerdo con esta fuente, los incidentes ocurrieron cuando la Policía israelí disolvió a grupos de manifestantes que les lanzaron piedras en algunos puntos como el paso de Kalandia, entre Jerusalén y Ramallah, o a las puertas de la prisión de Ofer, también entre ambas ciudades.