No hace mucho que esta emergiendo lo que se ha denominado medicina evolutiva o darwinista, que intenta proporcionar a esta ciencia un enfoque evolutivo. Ya que el hombre, al igual que el resto de organismos, es el resultado de los procesos evolutivos ocurridos en relación con el ambiente y presiones selectivas que rodearon a nuestros ancestros y en el que actualmente nos desenvolvemos, el pensamiento evolutivo ha empezado a estar presente en la medicina actual y a ser considerado por muchos médicos. Es quizá en las enfermedades infecciosas, en las genéticas y en las degenerativas no infecciosas (sobre todo las relacionadas con procesos de envejecimiento y el cáncer), donde la aproximación evolutiva promete una gran mejora del conocimiento y, por tanto, tratamiento de estas enfermedades. Veamos algunos ejemplos en los que el pensamiento evolutivo ha sido muy beneficioso para comprender las enfermedades.