Un acto de amor por su ciudad. Un centenar de voluntarios se encargó el sábado de repintar el casco histórico del puerto chileno de Valparaíso, declarado Patrimonio de la Humanidad en 2003, para recuperar las fachadas de los principales edificios. El programa recibió 80.000 dólares por parte de la Municipalidad y la buena disposición de los ciudadanos.