El Jefe del Estado Mayor, teniente general Benny Gantz, recorrió la frontera norte, tras los acontecimientos sucedidos, por el día de la Naksa, y que según información anunciada por la televisión siria, dejaron como resultado al menos 23 muertos y 350 heridos, cifra que Israel no ha confirmado aún y que el ejército investiga, analizando los acontecimientos, ya que se considera que estos resultados, fueron ampliamente exagerados.
Por su parte, voceros militares, presumen que gran cantidad de los activistas heridos o muertos, no recibieron la debida atención médica necesaria, ya que los mismos impidieron el libre paso, a los servicios de la Cruz Roja, por evitar detener la violencia de las manifestaciones y de esta manera dar lugar a inspecciones médicas.