En el debate del proyecto de ley del diputado Alex Miller (Israel Beitenu), que propone permitir a ciudadanos israelíes que abandonaron el país ejercer el derecho al sufragio, las presiones de factores contrarios parecen estar haciendo efecto. Así pudo apreciarse en declaraciones del diputado Zeev Elkind - quien encabeza los esfuerzos del partido Likud por hacer aprobar el proyecto - quien estimó hoy que la ley que se apruebe finalmente permitirá sólo que israelíes que abadonaron el país hasta un año antes de las elecciones generles puedan votar, y no cuatro o cinco como deseaba el Likud, ni diez, como proponía el proyecto original.