7.000 de los empleos suprimidos tendrán lugar en Japón y los 3.000 restantes en el extranjero. El fabricante japonés de productos tecnológicos suprimirá así casi el 10% de su plantilla. Este recorte forma parte de la estrategia de la empresa para combatir sus pérdidas. Estima que serán de 981 millones de euros en el año fiscal que cerrará el próximo 31 de marzo. http://es.euronews.net/