Indígenas de la amazonía boliviana que protestan contra la construcción de una carretera que atraviesa su territorio avanzan sin contratiempos hacia La Paz y generan más adhesiones de sindicatos obreros y campesinos, días después de haber sido reprimidos por la policía y en franco desafío al presidente Evo Morales, quien los acusó de tener fines políticos.