El claro apoyo a los rebeldes por parte de algunas fuerzas de la OTAN, incluso en la búsqueda de Muamar Gadafi y su entorno, empieza a salir a la luz pese a los desmentidos de la Alianza Atlántica, que asegura atenerse estrictamente al mandato de la ONU.
Reportes periodísticos confirmaron esta semana que Gran Bretaña y la OTAN violan abierta y descaradamente la resolución del Consejo de Seguridad de la ONU, al contribuir con inteligencia, equipos de reconocimiento y hasta con efectivos militares disfrazados al llamado Consejo Nacional de Transición (CNT).