Todos tuvimos la gran dicha y oportunidad de estar en el país que ganó la Copa del Mundo. Vivimos toda la euforia y alegría de la gente, en nuestra memoria se quedaran grabados para siempre los colores y los sentimientos de la población del campeón del mundo de fútbol y lo principal, el gol de la victoria española, unos segundos de silencio y después el estallido de la alegría total en la Plaza Cibeles.