La vida de Gavril Gavris dio un giro radical el 20 de septiembre de 2008. Ese día sufrió un accidente laboral en la finca de caballos donde trabajaba que le dejó postrado en una silla de ruedas para siempre, sin embargo, su condición de trabajador 'sin papeles' ha hecho que hasta el momento no haya recibido ninguna ayuda oficial.