La bacteria que ha causado hasta ahora la muerte de 17 personas, fundamentalmente en Alemania, ha sembrado la discordia en Europa: Madrid reclamó compensaciones por el "clamoroso error" de Alemania, que atribuyó su origen a productos españoles, y Rusia prohibió la importación de verduras europeas. En Hamburgo, foco inicial de la infección, una madre, Stephanie Lucka, ha tenido a sus tres hijos en el hospital. Un informe de AFPTV