Miles de uruguayos marcharon en silencio para que se investigue el destino de los desaparecidos durante la dictadura (1973-1985), pocas horas después del fracaso de un proyecto para anular una ley que evita que se investiguen las violaciones a los DDHH en ese período. Convocada todos los 20 de mayo desde 1996 por la organización Madres y Familiares de detenidos desaparecidos, la marcha recorrió unas 20 cuadras detrás de una gigantesca pancarta de "Verdad y justicia, derecho de todos, responsabilidad del Estado".