El sumo fue una vez el deporte más popular de Japón. Pero los problemas con las apuestas, las suspensiones por el uso de drogas y los asaltos han dejado destrozada la imagen de este deporte. Veamos el informe. El antiguo deporte del sumo soportó otro duro golpe durante el fin de semana. El campeón Kotomitsuki y su maestro, Otake, fueron expulsados como parte de una batalla contra las apuestas ilegales. El Sumo tiene sus orígenes en la mitológica fundación de Japón. Fue el cuerpo regulador de este deporte el que decidió expulsarlos después de una investigación acerca de las apuestas y los supuestos lazos con el crimen organizado. Kotomitsuki es el primer "ozeki", el segundo rango más alto en el sumo en recibir este castigo. Esto significa una vergüenza para un negocio deportivo que se estima produce casi cien millones de dólares al año en ingresos. Más de sesenta luchadores han confesado haber apostado. La imagen del sumo ha sido duramente golpeada en los años recientes. Hubo suspensiones por el uso de drogas y por el caso de la muerte de un aprendiz de diecisiete años de edad despues de ser asaltado El deporte estuvo perdiendo fanáticos y patrocinadores en los años recientes. La Asociación de Sumo de Japón consideró la posibilidad de cancelar el próximo torneo, pero finalmente decidió seguir adelante. Fují, Xerox y por los menos otros cuatro patrocinadores suspendieron su apoyo al torneo Nagoya bashó. Por su parte NHK, canal de televisión nacional, pronto decidiría sus planes de transmisión, algo que era fijo por más de cincuenta y cinco años. El mayor escándalo del sumo sucedió cuando Asashoryú, el gran campeón de Mongolia , se retiró del deporte a principios de este año luego de una denuncia por haberle roto la nariz a un hombre en una pelea afuera de un club nocturno de Tokio El sumo no ha tenido a un "Yokozuná" japonés desde que el gran campeón Takanohana se retiró en el 2003, una causa más para algunas de las pérdidas de seguidores y de prestigio.