La falta de ética y principalmente la falta de un marco legal. Y de respeto contundente en ambas instituciones que permite que públicamente servidores públicos a veces artistas, jueces y amistades de estos, fomenten la ruptura legal que se basa en el orden constitucional, reiteradamente de la Constitución Mexicana, Código Penal del D.F. y Ley de Responsabilidades Administrativas de los Servidores Públicos, Mandatos y leyes internas de los Programas de Apoyos, por ello abusan y aparecen anomalías, irresponsabilidades y principalmente la falta de pluralidad, democracia creativa y laboral.