Un total de 473 tripulantes de la Flotilla Global Sumud, arrestados por las autoridades israelíes cuando navegaban hacia la Franja de Gaza con ayuda humanitaria, han sido trasladados a la prisión de Saharonim, ubicada en el desierto del Néguev, al sur de Israel. La situación se mantiene bajo cierta confusión e incertidumbre, ya que no hay confirmación oficial completa sobre el estado de los detenidos ni sobre los cargos que enfrentan.

Durante su detención, el ministro de Seguridad Nacional de Israel, Itamar Ben Gvir, acudió al lugar, según muestra un vídeo que circula en redes sociales. En las imágenes, Ben Gvir califica repetidamente a los activistas de la flotilla como "terroristas" y los acusa de "apoyar el terrorismo".

Además, el ministro accedió a uno de los barcos de la flotilla y mostró imágenes del interior, denunciando lo que describió como un "desorden" resultado de una supuesta "gran fiesta" a bordo.

Este nuevo episodio agrava la tensión internacional en torno al bloqueo sobre Gaza y la criminalización de las misiones humanitarias, mientras organizaciones de derechos humanos y observadores internacionales piden transparencia sobre el trato a los detenidos.