Una forma fácil de intentar comer más sano es cocinar una receta nueva cada semana. Esto también le ayudará a mejorar sus habilidades culinarias.
La lectura es beneficiosa para personas de todas las edades, así que ¿por qué no intentar leer un libro nuevo cada mes?
Cree un horario de limpieza sencillo y realista que todos los miembros de la familia puedan cumplir.
Beber menos alcohol puede ahorrarle dinero y mejorar su estado de ánimo, su piel, su sueño y su sistema inmunitario.
Evite los ascensores y suba las escaleras andando, corriendo o trotando. Es una forma fácil de incorporar más ejercicio a su día a día.
Las investigaciones demuestran que el voluntariado puede reducir los niveles de estrés y disminuir la presión arterial.
Los teléfonos tienen 10 veces más bacterias que el asiento del váter, así que es buena idea empezar a desinfectarlos una vez a la semana.