República Dominicana es uno de los países de América Latina y el Caribe con la mayor tasa de embarazos adolescentes, una lacra a la que mujeres impulsadas por el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) han decidido poner fin con una ofensiva que incluye desde el empoderamiento de las niñas, hasta más educación sexual o planificación familiar.