No les gusta el jarabe democrático.
Los mismos que ahuecan el ala cuando los violentos revientan actos del PP y de VOX, revelan, de repente, tener una piel muy sensible cuando, sin atisbo alguno de violencia, son ellos quienes reciben el descontento del personal.
En la jornada del 11 de diciembre de 2024 comparecía en Parlamento Europeo el expresidente español José Luis Rodríguez Zapatero para participar en un acto de la European Gender Equality Week.
Varias personas, entre ellos eurodiputados de VOX, se acercaron hasta el lugar para protestar por la presencia de un político con vínculos inequívocos con el régimen del dictador venezolano Nicolás Maduro.
Las lágrimas progres no tardaron en llegar.
Y hasta allí también salió como una posesa Laura Ballarín, eurodiputada del PSOE, para exigir con métodos bastante macarras que se dejase de grabar y además esgrimiendo su condición de política para darle más relevancia y contundencia a su petición.
Posteriormente, el PSOE hizo un comunicado condenando los hechos y arremetiendo contra los eurodiputados de VOX Hermann Tertsch y Jorge Buxadé.
El presidente de la delegación española del grupo de Socialistas y Demócratas, Javier Moreno, remitió un escrito a la presidenta del Parlamento, Roberta Metsola, acusando a los eurodiputados del grupo Patriots de haber organizado el escrache contra José Luis Rodríguez Zapatero.
En el texto remitido a la autoridad parlamentaria, Moreno acusó al eurodiputado de VOX Hermann Tertsch de haberse acercado al expresidente socialista para proferir todo tipo de insultos y amenazas, amén de haber llamado al expresidente español "asesino".
También apuntó que Jorge Buxadé se acercó hasta el lugar para insultar a miembros de la delegación socialista como a los participantes en el acto protagonizado por Zapatero.