Jorge Lanata, internado en el Hospital Italiano desde junio, enfrenta un cuadro delicado tras detectársele una trombosis. Aunque su estado es frágil, hay señales positivas: pasó la noche sin fiebre. Los médicos trabajan intensamente para controlar las infecciones y las escaras causadas por su prolongada estancia en cama. El traslado a una clínica de rehabilitación neurológica sigue siendo incierto debido a los riesgos que implica.