Rusia ha lanzado una advertencia contra los planes estadounidenses de desplegar misiles de medio alcance en Japón, calificándolos de amenaza directa para su seguridad.
Los informes sugieren que Estados Unidos y Japón están desarrollando una estrategia militar conjunta que incluye el emplazamiento de misiles en Japón y posiblemente en Filipinas para hacer frente a posibles conflictos cerca de Taiwán.
La portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores ruso, Maria Zakharova, acusó a Japón de utilizar las tensiones sobre Taiwán para justificar el estrechamiento de los lazos militares con Washington.
Afirmó que cualquier despliegue de misiles estadounidenses en Japón obligaría a Rusia a tomar contramedidas para reforzar sus capacidades de defensa.
Zakharova señaló la actualización de la doctrina nuclear rusa, que amplía los escenarios para el uso de armas nucleares, como una clara señal de la disposición de Moscú a responder.
El viceministro de Asuntos Exteriores, Sergei Ryabkov, también insinuó la posibilidad de que Rusia despliegue sus propios misiles en Asia.
Moscú advirtió a Occidente de que cualquier despliegue de misiles terrestres provocaría respuestas decisivas y simétricas.
Zakharova destacó la avanzada tecnología de misiles de Rusia, haciendo referencia al reciente lanzamiento de su misil hipersónico Oreshnik, como prueba de su preparación.